23 de enero de 2011

"Hoy me ha pasado..." tiene material para hacer una tesis - Reseña de profundidad en Lector Cómplice

El pasado viernes apareció una nueva reseña en el blog Lector Cómplice que me sorprendió. Me sorprendió especialmente por el profundo análisis a que sometió a la novela, la cual casi podríamos decir que psicoanalizó (o que psicoanalizó al autor, o sea a mí, a través de la misma). No sé como describirlo (y debería, como escritor que soy), pero me recorre una extraña sensación de satisfacción al comprobar que algunas personas puedan ir más allá leyendo Hoy me ha pasado algo muy bestia, y que sepan leer entre líneas y comprender que no sólo quise contar una historia de superhéroes actual y realista.

Sin más, pues no quiero destriparla, os dejo esta magnífica reseña, escrita por Lesbia Quintero:

"Crónica de un superhéroe urbano.

Una terrible discusión de sus vecinos, es el detonante para que el diseñador Daniel García comience a vivir una serie de insólitos sucesos en Hoy me ha pasado algo muy bestia, la primera novela del escritor español Daniel Estorach. La historia está relatada en primera persona y queda registrada en un diario que el diseñador lleva, nada más y nada menos, que en su Blog. El escritor utiliza este soporte digital para escribir la narración con la cual plantea una nueva estética que fractura los límites del subgénero. Esta innovación señala el carácter vanguardista en que se inscribe la obra, al tiempo que propone una nueva forma de leer la realidad. El autor de Hoy me ha pasado algo muy bestia, utilizando recursos metatextuales despoja al superhéroe clásico de sus características tradicionales. Mediante las peripecias de un hombre común y corriente, quien comienza a padecer unas extrañas hemorragias nasales y una especie de desdoblamiento cuando se enfurece, el autor hace una puesta en escena de su original propuesta. Daniel García, se siente confuso y busca posibles respuestas en sus amigos pero ninguno le aclara el enigma que está cambiando su vida. Desde su atalaya virtual, el personaje observa cómo su vida se va transformando en una vorágine que día a día destroza su precaria tranquilidad. Mediante esta historia, el autor da cuenta de una sociedad atomizada, sin rostro, que ha cambiado sus valores éticos por un consumismo desmedido.

El protagonista de esta historia, aturdido por los cambios que comienza a experimentar, duda de su propia estabilidad mental, y cuando los hechos le demuestran que no se trata de ningún tipo de enfermedad, se inicia la odisea del superhéroe urbano. El autor toma referentes del medio cotidiano y los inserta dentro de un marco referencial que se representa en la ciudad de Barcelona. El entramado argumental de Hoy me ha pasado algo muy bestia, se estructura en una red sociocultural, donde los personajes interactúan, se confrontan, y cuestionan las instituciones encargadas de la seguridad ciudadana. Daniel García experimenta la rabia  y, sobre todo, la impotencia ante la delincuencia que cada vez toma dimensiones más alarmantes.

Daniel Estorach recrea, mediante su personaje, a un ser aturdido por las dudas que lo acosan con respecto a temas fundamentales como los valores éticos y el poder. El diseñador se enfrenta a sí mismo como un ser común y corriente que, además de sufrir migrañas y trabajar para sobrevivir, debe conocer a ese otro ser que tiene ciertos poderes sobrehumanos. A través de las páginas de Hoy me ha pasado algo muy bestia, se percibe que el anonimato en el cual debe permanecer el personaje y la soledad en la que se ve obligado a vivir, son algunos aspectos que rebasan su existencia. Daniel no es totalmente consciente de la misión tutelar que ha empezado a ejercer sobre la ciudad de Barcelona, y la responsabilidad que ello implica, las consecuencias se manifiestan con su carga ineludible.

En esta obra de profundo contenido ético, social y espiritual, aparecen algunos elementos muy simbólicos, como la relación entre lo diurno y el mundo nocturno. La música y el ritmo, los cuales evocan viejos rituales dionisiacos, y cómo éstos fungían de catalizadores de energías reprimidas. Los sueños recurrentes, colmados de simbología, son otro aspecto sintomático que aparece en las trazas discursivas solapadas en la narración. El encuentro de fuerzas antagónicas del bien y el mal, pero esta vez caracterizadas por una sospechosa ambigüedad, remiten al carácter  contradictorio de lo finito, y lo imperfecto. Hoy me ha pasado algo muy bestia, es una obra que contiene una gran fuerza narrativa y enuncia un universo ficcional en constante transformación."

2 comentarios:

Lector Cómplice dijo...

Leer "Hoy me ha pasado algo muy bestia", no sólo fue fascinante por el ritmo y la dinámica de la narración. Sino también, fue el descubrimiento de un valioso material literario que contiene una propuesta estética que rebasa los límites de las historias sobre superhéroes. Efectivamente, se puede hacer una tesis sobre el tema, tomando como eje axial del planteamiento a " Hoy me ha pasado algo muy bestia". Felicidades Daniel, sospecho que por ahí debe venir una segunda parte.

Daniel Estorach Martín dijo...

Muchas gracias, Lector Cómplice, por tus amables palabras. Y sí, en efecto estoy inmerso en la escritura de la segunda parte de la historia, de la que aquí mismo se pueden leer ya los primeros 15 capítulos.

Un saludo.